Otelo Lacroze

La niñez es la mejor etapa de todas porque las preguntas brotan como leche hervida: ¿Por qué dos por dos es cuatro? ¿Por qué gira la tierra? ¿Por qué sibarita es tan rica?
De hecho, entre toda esa masa de materia que uno genera entre los tres y los ocho, cabe destacar un pensamiento para mi particular -el pensamiento de Juana-, para poder, a partir de este, avanzar hacia el razonamiento propia de la adolescenciaª para obtener un reflexión que quizás valga la pena ser leída -¡total! ¡Si ya llego hasta acá!-
Juana alguna vez seguro dijo: si en algún momento el negro, pudo llamarse blanco, y el blanco llamarse negro,(apartemos ahora a Juana) ¿quien dice que en realidad la puta no es la santa, y la santa no es la puta?
La mas puta cuando entra a un telo, entra para trabajar, y la mujer que trabaja, la que se mantiene por si sola, la mujer independiente, es una mujer hecha y derecha ¿verdad?
En oposición, la que se cree mas santa, es la que entra como la mas puta, porque entra en ese mundo de las camas y los resortes -ay... el ruido de los resortes- con un placer secreto. Se pellizca los cachetes, buscando ruborizarse, y cuando se encierra en el ascensor, se desabrocha el saquito beige que le aprieta sobre los tacones rojos, el escote hasta el ombligo, y la tanguita.
¡Ay que putita!
Digna soy já





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ª Entiendase pensamiento adolescente, como un pensamiento maduro, de hombre/mujer que quiere poseer por alguna estupida razon, el razonamiento de alguien de aproximadamente cuarenta años (que toma todo por sabido, y de hecho sabe muy poco al respecto -de nada-).
No olvide, que todo pensamiento adolescente esta acompañado por palabras ornamentales, que carecen de intención si se analiza el contexto en que están inscriptas. De hecho, muchas veces tantas palabras solo entorpecen una simple explicación al pie de la pagina, en vez de servir como embellecimiento, pero ahora que usted leyó esta breve explicación siga su previa lectura acerca del pensamiento en particular,