Pienso que estos ojos que te miran, este cuerpo que te abraza, esta boca que te besa, tienen una existencia previa a mi conciencia. Son movimientos sobre los cuales no tengo poder, movimientos que alguien ha impuesto sobre mí brutalmente.
Pero también admito que me nacen cinco mil palabras tontas, diez recuerdos, treinta ganas de llorarte, de los que soy completamente culpable.
Reconozco que me he convertido en un fraude, en una tristeza, en una constante melancolía que se repite en ejemplos de tres separados por comas. Reconozco que de haberme conservado hermética, ahora no seria un constante golpe contra la pared que tiene ganas de llorarte (y llorarte hasta que deje de llover y ya no salga el sol, llorarte). Y reconozco, que dándome contra la pared (una vez, dos veces, diez veces) vengo a entender que solo me queda el transcurrir, y que soy yo la tarada que quiere saber qué es la dicha, la pasión y la embriaguez.
1 comment:
"...en una constante melancolía que se repite en ejemplos de tres separados por comas." esta frase me pareció muy buena, sobretodo porque al principio del parrafó pensé: "mucha literatura, alguien puede sentir eso de ser un movimiento anterior, previo?" y el parrafó siguiente se redimió, seguía siendo literatura pero esa frase es muy buena
El P U
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